| La Universidad de la República |
| Daniel Volpi Avedutto |
En nuestra principal casa de estudios se han tributado homenajes a muchas personalidades, pero ninguno a su creador. ¿A qué se debe tan imperdonable omisión? |
Nuestra mayor casa de estudios fue fundada por don Manuel Oribe el día 27 de mayo de 1838, como bien lo dice Jorge Pelfort en su libro Precursor de nuestra Educación, publicado en 1988 por Ediciones de la Plaza. Sin lugar a dudas, nuestra Universidad pública fue creada por el Segundo Jefe de la Cruzada Libertadora, los documentos que cita Pelfort hacen plena prueba, existe contundencia y eso no se discute. Sin embargo, no es usual que las autoridades de esa casa de estudios den a conocer ese dato. En mi pasaje por ella he visto la serie de homenajes que tributaron al cumplirse los 160 años, así como también los 165; se tributó homenajes a muchas personalidades nacionales e internacionales, pero jamás he visto un homenaje a su creador: Manuel Oribe. ¿A qué se debe tan imperdonable omisión? |
La más grave injusticia histórica se da con Manuel Oribe, el padre de nuestra Universidad de la República, a quien nunca le tributan un reconocimiento. |
En el año 1992, año del bicentenario del natalicio de Manuel Oribe, el Centro de Estudios para la Democracia Uruguaya (CELADU) editó un libro titulado La Universidad. Se trata de una obra inédita del escritor uruguayo Carlos Real de Azúa. Una verdadera joya por su contenido académico e histórico. Allí en la página 123, bajo el subtítulo de «Las formas de politización», arranca un desarrollo sobre la partidarización existente en la Universidad en su época. En la página siguiente dice: «Como los partidos de izquierda son varios, nunca existió hegemonía cabal de uno solo, aunque sí predominios relativamente estables. Desde antes de 1958 hasta mediados de la década del 60 el socialismo fue sin duda el titular de este predominio relativo, sostenido en buena parte desde 1956 por la poderosa personalidad del rector Cassinoni. En los últimos años y hasta la clausura fue ascendiendo el copamiento de posiciones y el incremento de influencia del Partido Comunista pero también la de los grupos de izquierda menos institucionalizados liderados por el Movimiento 26 de Marzo, verdadera fuerza cogobernante de la Universidad a partir de 1972». Terminando el párrafo hace referencia a las relaciones de la Universidad con el Movimiento de Liberación Nacional - Tupamaros. Seguidamente, en la página 109, Real de Azúa desarrolla un análisis que lleva como subtítulo «El militante y la militancia», analizando precisamente la militancia de los estudiantes universitarios afiliados a la FEUU. En la página 121 hace referencia a la existencia de un personal especialmente adiestrado que dedicaba la totalidad de su tiempo a esta actividad en patios y corredores, seguidamente en el capítulo de Notas, en el número 125, página 192, dice textualmente: «En el caso de los afiliados al Partido Comunista, siempre corrió el rumor, nunca explícitamente desmentido, de que percibían una mensualidad, si bien modesta, por esta dedicación a tiempo entero». Esta situación que describe de forma muy ilustrada este prestigioso escritor, en esencia, se mantiene incambiada en nuestros días. El paraninfo de nuestra Universidad es utilizado muchas veces con fines proselitistas por el Frente Amplio. Recordemos que ese paraninfo ha sido visitado por personalidades con filiación marxista a nivel internacional, como lo fue Ernesto «Che» Guevara, quien brindó allí una conferencia para sus simpatizantes. La FEUU en nuestros días sigue exhibiendo banderas con su imagen en actos proselitistas del partido de Gobierno. Recuerdo haberla visto en un acto por el referéndum por Ancap en 2003. Vergonzoso; la imagen del Che gigante en el Paraninfo, y ni siquiera existe una figurita del fundador de la Universidad, el brigadier general Manuel Oribe. También prestemos atención a quienes fueron decanos en las facultades. El Dr. Ricardo Ehrlich, de decano de la Facultad de Ciencias pasó a ser intendente de Montevideo por el Frente Amplio; la decana de Ingeniería María Simón luego pasó a ser ministra de Educación y Cultura del primer Gobierno del Frente Amplio; y así podría seguir enumerando ejemplo tras ejemplo de decanos que pasaron a ocupar cargos en el Gobierno de izquierda. En 2011 se dio una situación vergonzosa en el Consejo de Facultad de Derecho. La negativa carente de fundamento por parte de la FEUU y otros consejeros afines al decanato de turno ante la propuesta de asignarles títulos de profesores eméritos a dos grandes docentes de nuestra casa de estudios: los doctores Mariano Brito y Daniel Hugo Martins. Un hecho sumamente lamentable que dejó en evidencia una absurda persecución por motivos ideológicos debido a que estos distinguidos profesores pertenecen al Partido Nacional. Eso sin dudas se trata de una clara violación a los principios del ser universitario, donde deben primar el pluralismo y el sentir democrático. Esos dos hombres blancos le aportaron mucho a la Universidad, mediante el dictado de sus cursos han formado a buenos profesionales del Derecho por el amor a una causa como lo es la Universidad pública. La más grave injusticia histórica se da con Manuel Oribe, el padre de nuestra Universidad de la República, a quien nunca le tributan un reconocimiento. || |
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