| Mujica por la vida y la convivencia |
| Jorge Macera Perrone |
El 19 de junio, por cadena nacional de radio y televisión, el Sr. Presidente don José Mujica se asombró de la situación que vivimos los uruguayos hoy día. |
Dijo el Sr. Presidente: «El primer valor que hay arriba de la tierra es la vida». «La vida no se compra, pero sí se gasta y se puede gastar inútilmente». «[La vida] constituye el valor más fundamental de todos los valores». «La vida hay que defenderla, hay que cuidarla». «Tal vez… tal vez estamos pagando el precio de alguna vieja fractura en nuestra sociedad». «La violencia campea». «No voy hablar de los costos de la drogadicción». «¿Qué nos está pasando?». «Es obvio que el Estado tiene que luchar por asegurar la seguridad». «El Estado [no puede] eludir la responsabilidad de brindar seguridad a la ciudadanía». «Hay que revisar y preguntarnos qué nos está pasando. Por qué tanta violencia. Por qué tanta dificultad para lo elemental, aprender a convivir. Porque si la vida es el valor primero, nada más importante que la paz». «No podemos inutilizar tantos años de vida joven inútilmente. No podemos concebir que haya jóvenes que balean a otros para conseguir un par de championes o algo por el estilo». «Allí, donde se sientan los niños, coloquemos el tema de cuidar la vida como primer tema». «Este llamado [es] a repensar el valor que tiene la vida».* La verdad, no sabemos si esto es todo paco y pico o tiene algo de sinceridad. Nos llama la atención que hoy se acuerde de la vida, que no pueda concebir «que jóvenes balean a otros» y se haya olvidado de cuando él y sus compañeros del Movimiento de Liberación Nacional Tupamaros (MLN-T) mataban a mansalva, por la espalda, o inyectaban pentotal, como lo hicieron con el peón rural Pascasio Báez. Pero analicemos algunos hechos de este Gobierno en el presente: La inoperancia puesta de manifiesto a través del Ministerio del Interior, no realizando el más mínimo esfuerzo en procura, no ya de poner freno al delito, sino de combatirlo. Todos los días una persona cae abatida por las balas de los delincuentes, mientras que otros quedan malheridos. Mientras esto sucede, el Sr. Ministro del Interior dice en el Parlamento que estamos estudiando, que tenemos un plan, que hemos acordado con la oposición tal o cual medida; y mientras tanto la delincuencia prolifera y crece como almácigo bien abonado y regado por un Ministerio incapaz o cómplice de la delincuencia, porque hay jerarcas policiales que se niegan a llevar adelante o iniciar una investigación por delitos de estafa, robo, peculado, etcétera. Estas no son solo palabras por ser opositores al régimen, son hechos reales que han sucedido, y por algo se quiere escribir la historia desde 1973 y borrar el pasado, porque en el pasado varios de los actuales gobernantes, comenzando por el Sr. Presidente José Mujica, cometieron muchas fechorías, pero como ellos dicen, no debemos olvidar, creemos nosotros que tienen razón: no olvidar de un lado, ni tampoco del otro. Cada cual que asuma la responsabilidad de sus actos, por más pesada que sea, pero no pueden tirar la piedra y esconder la mano. Y para refrescar la memoria y no olvidar ni olvidarse, detallaremos algunos hechos en los que tomaron parte activa algunos de los actuales gobernantes: 05/05/1962. La sede de la Confederación Sindical del Uruguay, que se encontraba ubicada en la calle Paraguay al 1273 entre Soriano y San José —organización sindical que no aceptaba la izquierda, porque no traicionaba a los trabajadores— es invadida por una horda salvaje de unos cien cañeros de Artigas, que superaban tres a uno a los presentes en el local sindical, a los cuales atacan salvajemente. Los cañeros, muy guapos ellos, dan muerte de un disparo de arma de fuego a Dora Isabel López de Oricchio, estudiante de enfermería. Luego del valiente y guapo ataque de los patoteros cañeros, días después, la sede de la Confederación Sindical del Uruguay es incendiada. 02/07/1964. La oficina de prensa de la Jefatura de Policía de Montevideo emite el siguiente parte: «Un viejo delincuente, que hace tiempo manteníase inactivo, intentó asaltar en compañía de un feriante a un cobrador de Sudamtex cuando llegaba con dinero para el pago de obreros. Los sujetos utilizaron una motocicleta a efectos de poder huir rápidamente del lugar, en la calle Lavalleja y Acevedo Díaz. Sus movimientos fueron percibidos por personal de la firma, que dio aviso a las autoridades de la Seccional 7ª y se frustró el golpe, deteniendo los policías a uno de los atracadores, José Alberto Mujica Cordano, oriental, casado, de 29 años. Se encuentra prófugo quien planeó el golpe, Ruben Anchetta». 08/10/1969. Es asesinado Carlos Burgueño Rodríguez por un comando que toma la ciudad de Pando, dirigido por Eleuterio Fernández Huidobro. 11/02/1971. José Leonardo Villalba, cabo de la Guardia Metropolitana, es asesinado por José Mujica Cordano, de siete disparos por la espalda. 02/09/1971. Nelson Lima Gutiérrez y Daniel Willer Soto Romero, agentes policiales, son asesinados en la puerta del hospital Pedro Visca, donde cumplían vigilancia, por integrantes del MLN-T que vestían guardapolvos, comandados por Lucía Topolansky. 27/01/1972. Rodolfo Leoncino, inspector y jefe de seguridad del penal de Punta Carretas, es asesinado en la esquina de su casa mientras aguardaba el ómnibus por un comando dirigido por Eduardo Bonomi, actual ministro del Interior. 13/02/1972. Segundo Fernández y Juan Manuel Sánchez Molinari son asesinados en la comisaría de Soca, de donde se roban armas y uniformes por un comando dirigido por Eleuterio Fernández Huidobro. 09/12/2011. El Sr. subcomisario Fernando González, al frente del sector Estafas del Departamento de Delitos Económicos de la Jefatura de Policía de Montevideo, se niega a la realización de una investigación por una denuncia documentada de estafa, alegando que no podía perder tiempo en la investigación, dado que no sabía cuándo se presentarían los involucrados a declarar, una vez citados a su despacho. Mucho más podemos agregar, como el caso de la limpiadora del bowling de Carrasco que fue asesinada cuando un comando subversivo hizo volar el lugar, el obrero del volante vilmente asesinado por las hordas salvajes de la izquierda en 8 de Octubre y Habana, en plena campaña electoral sindical, y las placas recordatorias del hecho, colocadas en dos oportunidades, que fueron destruidas, y a quien ya mencionamos, el peón rural Pascasio Báez, que fuera asesinado por los tupamaros cuando descubre una tatucera, y cuyo homenaje en el departamento de Flores —nominar una arteria con su nombre—, resulta rechazado, ya que a los votos del Frente Amplio se le sumaron los votos del Partido Nacional. Ante estos hechos, cómo podemos creer que la izquierda en la persona del propio Presidente o de sus ministros, que han cometido los más variados delitos, esgriman la más mínima actitud en defensa de la población, población a la que le robaron las alhajas depositadas en caja nacional y de las cuales nunca le rindieron cuenta a las víctimas, y guardan total y hermético silencio. La venta de esas valiosísimas alhajas les sirvió para adquirir campos, chacras, estancias, supermercados, empresas de seguridad, pagarse buenos abogados que los defendieran de tantos delitos cometidos. Viendo el panorama que se nos presenta ante nuestros ojos, ¿podemos pensar que alguien de este Gobierno piense, actúe, analice cómo proteger a la ciudadanía, cuando ayer cometieron el mismo delito? ¿Dónde vieron que entre delincuentes se ataquen, a no ser para cobrarse una vendetta? Por eso se enoja el Gobierno cuando el pueblo reclama seguridad, justicia, porque nuestros gobernantes del Frente Amplio sienten que todavía tienen una deuda con el pasado (que ocultan) y por lo tanto no tienen moral para atacar a los delincuentes, los apoyan, porque estos siguen sus huellas. El narcotráfico en Perú, con los insumos que utiliza en elaboración de la coca, ha contaminado las aguas del río Amazonas, y la Amazonia sigue corriendo el riesgo de desaparecer dada la deforestación que vienen llevando a cabo los narcotraficantes para la plantación de marihuana. Estos narcotraficantes cuentan con el apoyo de Sendero Luminoso y del Partido Comunista. Las fachadas de las viviendas de los lugareños lucen las siglas PCP, Partido Comunista Peruano, y al costado Partido Comunista, junto a Sendero Luminoso. Los habitantes no pueden limpiar los frentes de sus viviendas, porque de hacerlo, son incendiadas y sus moradores fusilados. Así actúan y engañan a la población drogándola.
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