La Unidad Alimentaria pone en riesgo a Melilla |
Lilián Fachelli |
¿Qué será la Unidad Alimentaria de Montevideo (UAM)? La Intendencia de Montevideo (IM) pretende imponer un mega emprendimiento al que denominó Unidad Alimentaria de Montevideo (UAM), en la que se instalarán empresas dedicadas a la alimentación. En virtud de este proyecto, la IM realizó una expropiación de noventa y cinco hectáreas en la zona delimitada entre Ruta 5 y Cno. Luis Eduardo Pérez, pagando la suma de 10.000 dólares la hectárea. Este emprendimiento no solo abarca el traslado del Mercado Modelo, sino que también se instalarán en este millón de metros cuadrados de cemento (equivalente a ciento trece Palacios Legislativos) servicios logísticos, industrias alimenticias, packings, centros de distribución, etcétera. Valiéndose de las mayorías obtenidas electoralmente, se decidió a puertas cerradas (solo con la presencia de ediles frenteamplistas) en la Junta Departamental un corrimiento de zona de este predio (de zona rural a zona mixta) para poder proceder a la instalación de dicho proyecto. Estas cien hectáreas cumplían la función de amortiguación natural, una zona que funcionaba como un «colchón» que impedía el avance de lo urbano sobre territorio rural, el cual, todos sabemos, necesita de ciertas condiciones para funcionar. ¿Qué dice el Plan de Ordenamiento Territorial (POT)? El decreto municipal 26986/996 declara de interés municipal preservar, valorizar y promover las áreas rurales de producción agrícola y las áreas de paisaje natural de la zona rural del departamento de Montevideo. «Se preservará y valorizará el carácter testimonial que poseen las construcciones de la zona rural y los entornos urbanos de los centros poblados vinculados a dicha zona». Para el suelo rural, el POT establece las medidas y condiciones precisas para la conservación, protección y potenciación de todos y cada uno de sus elementos naturales, productivos y culturales, bien sea: suelo, aguas, flora, fauna o paisaje, a fin de evitar su degradación o alteración. En su artículo D.279, Edificaciones, se prohíben en general las edificaciones o conjunto de edificaciones que puedan generar necesidades de infraestructuras y servicios urbanos, representen el asentamiento de actividades específicas del medio urbano en detrimento de las propias del medio rural o hagan perder el carácter rural al paisaje de su entorno. Especialmente se prestará atención a las situaciones de condominio, evitándose la formación de núcleos de población. «La zona rural del departamento de Montevideo comprende áreas de patrimonio natural con valores ecológicos significativos y zonas de producción agropecuaria que tienen importancia para el abastecimiento alimentario de la ciudad y en algunos casos para todo el país, según surge de la Agenda Ambiental Montevideo (2008-2012) para las áreas rurales». Algunas consideraciones La Unidad Alimentaria arrasará a mi entender las tres últimas zonas ecológicas significativas de Montevideo oeste: arroyo Pantanoso, humedales del río Santa Lucía y Rincón de Melilla. Arroyo Pantanoso: Humedales del río Santa Lucía: Rincón de Melilla: Melilla: Sus tierras son generosas y fértiles en un 100%, con un volumen productivo que oscila entre un 25 y un 30% de la producción frutícola nacional, y se mantiene un nivel de desocupación cero, y una calidad y calidez de vida que dan como resultado una comunidad armónica entre patrones, trabajadores y comerciantes, lo cual es ejemplo para el resto de la capital. Acoge a todo tipo de productores dedicados a la producción de una enorme diversidad de productos, incluyendo a aquellos que poseen una extensión de tres hectáreas hasta los que tienen predios de veinte hectáreas. Si bien el potencial productivo es la fruticultura en todas sus variedades, se está potenciando la horticultura, la producción de arándanos, criaderos de aves, cerdos y visones, floricultura, viveros y grupos de mujeres rurales con productos envasados de alta calidad y variedad junto con la elaboración de sidra, producto de la manzana de industria, junto con el auge de varias bodegas, cuyos vinos son reconocidos internacionalmente. La protección de la zona rural de Melilla es el principal motor para que esta zona conserve predios fértiles y disponibles para nuevos emprendedores. Así, destacamos el ejemplo de la vieja chacra y bodega pesquera que luego de muchos años de abandono fue adquirida y reactivada tanto en lo productivo como en lo turístico como es hoy la Bodega Bouza. Nuestra zona ha sido punta de lanza desde hace cuarenta años en lo que respecta a modificación de variedades, conservación de frutas, packing para mercado interno y externo y aplicación sanitaria para proteger la salud del consumidor y el medio ambiente. Posee una enorme riqueza paisajística sobre el río Santa Lucía, con sus humedales, con su flora autóctona y una fauna que son un pilar fundamental para la conservación y el uso sostenible de la diversidad biológica. ¡Melilla es maravillosa! Tal es así que los predios más pequeños que no son rentables productivamente, pero que poseen ventajas forestales y paisajísticas, han sido adquiridos por personas de la ciudad, como chacras de recreación y descanso. Contamos con la Cooperativa JUMECAL, que le permite, tanto a pequeños como a grandes productores (asociados como no asociados) estar a la vanguardia de las más modernas empresas, por cuanto obtienen la más avanzada información en lo referente a asesoramiento técnico, nuevas variedades, cursos de diversos tipos (tanto para patrones como para empleados), y la tecnología de última generación para la conservación de frutas, contando con una capacidad para 4000 toneladas y brindando créditos blandos para la variedad de insumos requeridos para llevar a cabo la tarea. Lo original de Melilla es que en un territorio tan pequeño, sin sufrir modificaciones prácticamente en el tiempo, encontrar tanta intensidad y diversidad productiva y una población que se dedica exclusivamente al trabajo y a disfrutar su estilo de vida, es algo sorprendente y magnífico. Estamos totalmente seguros de que por su ubicación geográfica estratégica, Melilla puede ser preservada sin interferir el desarrollo del país, solamente con buena voluntad y tomando conciencia por parte de las autoridades de lo importante que es nuestra zona y lo que ella engloba e involucra. Las normativas que existen actualmente para la protección de nuestra zona confirman lo antedicho, pero los diferentes gobiernos y autoridades de turno no han tenido ningún reparo en querer «aterrizar» enormes y disímiles proyectos que rápidamente aniquilarían a nuestra zona... ¿Te parecen pocas las razones para no destruir Melilla? ¡¡Juntos podemos salvarla!! Melilla, ¡¡esfuerzo de muchos, patrimonio de todos!! |
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