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Son pocas las horas que nos separan de fin de año, esa fecha que genera tanta locura, una psicosis de hacer en una semana lo que no se hizo en todo el año, como queriendo volver en el tiempo. Sin embargo, con la última vuelta del reloj, nuevamente serán 365 días que todos tendrán para sobrevivir, para correr contra las deudas, para pelear por sus sueños, no obstante el próximo año en esta fecha estaremos pensando lo mismo que hoy y el ciclo seguirá, pero qué habría de evitar esto, un cambio colectivo.

Tal vez quienes trabajamos en el rubro de la construcción somos de los que mejor entendemos esta situación, nos piden todo tipo de obras y tienen que estar prontas para fin de año, por tanto corremos contra el tiempo, el nuestro y el de todos nuestros subcontratos, que de igual manera están tapados de trabajo, que no representa para nada el promedio del año, sino esa actitud grupal del fin de año.

Pero bueno, a la hora de los balances, siempre es bueno aprovechar para mirar y proyectarnos hacia adelante, pero también para mirar hacia atrás, donde encontraremos el detalle exacto de los motivos de nuestro hoy, con nuestros aciertos y errores, pero que hablan mucho de nosotros.

En lo personal encaro un 2013 con mucha cautela, con alegría de festejar los veinte años de actividad comercial, allá por 1993 con veintidós años iniciaba mi empresa de construcción, hoy una marca totalmente reconocida, Casa Abierta, cientos y cientos de clientes en estos años, miles de horas compartidas en distintos hogares, que van moldeando nuestra personalidad, miles y miles de horas de trabajo generadas para nuestro personal.

Pero diez años más tarde nos embarcamos en una actividad complementaria y fue así que nació Cecatec (Centro de Capacitación Técnica), donde comenzamos a dictar cursos de construcción, instalaciones sanitarias, eléctrica, metrajes y presupuestos, cursos a medida, para luego comenzar a capacitar para el Estado, hoy a través de Inefop en todo el país, con cursos como maquinaria agrícola, uso de motosierra, reparación de motores fuera de borda, quesería artesanal, peón agropecuario especializado, entre otros tantos.

El 2011 marcó el inicio de dos nuevos emprendimientos en el ámbito de la comunicación, primero Montevideo contigo, un programa especial que recorre todos los barrios de Montevideo, cada sábado por CX22 Radio Universal, y como algo natural meses después fue el turno del nacimiento de Al día, una criatura que hemos cuidado con mucha pasión, con mucho celo, que ha ido dando sus primeros pasos por todo el país, que ya es lectura obligada para miles de personas en todos los rincones.

La cautela a la que hacía referencia es necesaria para afrontar años complicados que se nos vienen, nuestra sociedad es especialista en copiar lo malo, muy poco susceptible a las cosas buenas, a los ejemplos de entrega, de superación.

Por tanto la mejor forma que se ha encontrado de alimentar números mentirosos, es empeñar el futuro ya no de nuestros hijos, sino de nuestros nietos, cuando el país emite deuda pública para el año 2045, plata que dilapidamos hoy entregándola a sectores de la población sin contraprestación, pagando sueldos públicos increíbles, gastando sin control. Pero muchos se creerán la jugada, y repetirán que este es el Gobierno que más ha invertido en la historia.

Cuenta la historia que en una época existió el Arca de Noé, tal vez el secreto actual esté en acomodar el cuerpo, nuestra economía, para poder subirnos a un Arca de Noé moderna, el gran problema es encontrar el destino, para poder vivir las vidas que nos merecemos todos aquellos que la peleamos a diario, que hemos elegido naturalmente el camino del trabajo..

Lamentablemente nuestra sociedad se ha convertido en un caos, al que ya cada vez son más los inmunes, donde todo les resbala y todo se convierte en simple estadística, los asesinatos, mujeres golpeadas, racismo, animales maltratados, opresión, cantidad de pozos, de accidentes, de muertos, de heridos, esa base sigue creciendo como una gran pirámide, donde a alguna persona que la mira desde arriba, tal vez de un simple balcón, basta un tiro para arrebatarle la vida, como en las últimas horas a esta joven de veintiocho años, porque en la base de esta gran pirámide ya se confunden aquellos a los que todo les resbala con aquellos a los que poco les importa la vida de otra persona.

Simplemente para el final el deseo de un muy buen año, lejos de la base, pero con mucha cautela por estar en la cima, trabajemos todos juntos por el Uruguay que ya no es nuestro y se lo arrebatamos a nuestros nietos.
Gracias a todos por estar allí.